Dandri

Ámbar, hija del Daniel-San y Adriana (atrás).
Es una promesa, ya que no es como sus papás, sino mejor. No tiene sus mañas, pero si sus virtudes (y otras muchas).
A Ellos los conocí por accidente, cuando era un desadaptado de pelo largo y ellos eran chicos buenos; es curioso como las cosas cambian a las personas. Ahora ellos son los desadaptados (mucho menos que yo antes) y yo trato de ser el chico bueno. Siempre es una fiesta estar con ellos, aunque casi no hablamos. Siempre aprendo algo.

2 comentarios

[Yomero - 11 de marzo de 2004 - 00:45]

Ya van!

[nuestro nombre, pues...ya lo sabes, no ha cambiado. - 10 de marzo de 2004 - 03:39]

Siempre queremos hacer una fiesta cuando estamos de visita, ojala que ahora que volvemos sigan y podamos hablar mas seguido. Es una obligacion ser desadaptado, de lo contrario te meten en un cuadro, o te metes solo, tal vez por eso tenemos buena relacion porque nos juntamos entre los desadaptados.