Era tarde. Lo sé porque ya eran pocos los autos en el boulevard (porqué usamos palabras en otro idioma? será que nos disgusta el propio? o que no sabemos usarlo? Otro post...) y el ruido era mínimo. El perro lastimosamente flaco de Doña Pragénides alborotaba como siempre a la menor provocación. Ladraba su hambre, más que cualquier enojo. Yo caminaba de regreso a casa luego de un día muy pesado en la oficina y el mal humor me rebosaba, no porque Ángeles me tirara el café encima, manchando el pantalón de gabardina que tanto trabajo me cuesta planchar y por eso casi no uso, tampoco debido a que me regañara mi jefe, que bien merecido me lo tenía por tirar a la basura 3 días de trabajo, mucho menos porque me hubiera llenado de problemas desde que salí de la casa: El camión llegó lleno y no se detuvo por mi, luego entonces, llegué tarde 25 minutos (voy a tener suerte si no me descuentan de la quincena, ahora que ya estoy pagando la casa), el siguiente camión venía igual de lleno y aunque se detuvo me fuí colgando del pescante (por eso será pescante?) y la llovizna por calzada de la viga me arrugó el pantalón y la corbata de manera ofensiva, tanto que parecía yo mendigo. Me la quité. Tampoco era que la computadora se inhibiera y tuviese que rebootearla 5 veces, perdiendo media mañana. Era todo. Que tu no estés en la casa (que planeamos amueblar por mitades), que ya no quieras volver, que mis amigos me dijeran "te lo dije", que las cosas nunca me salgan bien por más que trato, que por más empeño que ponga siempre quedo mal, que mi trabajo sea un suplicio.
Por eso quise patear al aire y seguir pateando el poste, el bote de basura, la reja de Doña Pragénides. Cuando me di cuenta, el perro aullaba la muerte cercana y las luces encendían. Corrí a ocultar mi vergüenza, no fuera a ser que Doña Pragénides me dijera "te lo dije" y se riera condesendientemente y me mirara con lástima. Mejor me voy. Mañana será otro día.
Por eso quise patear al aire y seguir pateando el poste, el bote de basura, la reja de Doña Pragénides. Cuando me di cuenta, el perro aullaba la muerte cercana y las luces encendían. Corrí a ocultar mi vergüenza, no fuera a ser que Doña Pragénides me dijera "te lo dije" y se riera condesendientemente y me mirara con lástima. Mejor me voy. Mañana será otro día.
9 comentarios
Paco -
Los buenos deseos nunca sobran, de manera que te deseo lo mejor de lo mejor que se pueda obtener.
Paula -
Salud y amor que hace algunos días que no te lo deseo.
Paco -
Ser mediapersona no es nomás el nombre. Siempre será mejor tener un nahual chafa que no tener nada.
Lagarta? o lagartona?
Paula -
Paco -
Si no había huellas de nada fuera -lo cual es muy muy improbable en mitad de la sierra, con tantos animales dispuestos a comer desperdicios- se tenía a la persona calificada como mediapersona, pues no tenía nahual y no había animal al cual pedir ayuda en caso de enfermedad y/o muerte. Casi condenados.
Probablemente serías Paula automóvil, o Paula moto, o paula lagarto, o Paula cuervo. No se.
Paula -
Paco -
Paco -
Masiosare, por ejemplo, extraído del himno nacional ("mas si osare un extraño enemigo"), como muestra de la idiosincracia del indígena.
Se usaba (entre tribus Oaxaqueñas) añadir al nombre cristiano el del nahual (ente animal ligado de por vida al sujeto), que se averiguaba observando las huellas visibles alrededor del jacal un día después del alumbramiento. El nahual llegaba a visitar al recién nacido, para conocerle y amarrarse de por vida
Paula -